El aceite de oliva y los frutos secos previenen el deterioro del cerebro
Los componentes antioxidantes y antinflamatorios de los frutos secos y el aceite de oliva los convierten en excelentes aliados contra el deterioro cognitivo (que puede conducir a la demencia o al alzhéimer), según se desprende de un reciente estudio español publicado en la revista JAMA Internal Medicine.