La pequeña Amelia se hace mayor. Paula Bonet y Elisenda Roca
La pequeña Amelia se hace mayor. Paula Bonet y Elisenda Roca
A veces el libro se convierte en un juguete donde el niño mira el mundo, recrea espacios y se reconoce en los personajes no solo a través de las palabras, también de manera sorprendente a través de las ilustraciones cuando se despliegan formando pequeños teatrillos.
Son los pop-ups, los libros desplegables que arrancan un Ohhh!!! y hacen que abramos los ojos con sorpresa. Tienen un tremendo atractivo para todos.
Hoy traemos uno muy especial porque, ¿quién no ha tenido la sensación de haber encogido o crecido como le sucedió a Alicia?
Asómate. Amelia es preciosa y crece. La infancia se vive en un eterno presente continuo. Solo el tiempo del adulto es quien devuelve la mirada al pasado.
La pequeña Amelia se hace mayor.
Elisenda Roca
Ilustraciones de Paula Bonet
Editorial Combel, 2014
La pequeña Amelia vive en un mundo donde todo es grande, muy, muy, muy grande.
Recuerdo que no hace mucho tiempo volvimos mi hermana y yo a la casa de nuestra infancia. A las dos nos sorprendió cómo todo nos parecía ahora muy pequeño y en nuestra memoria las habitaciones, los pasillos, las ventanas…todo, nos resultaba enorme. En un momento vivimos el síndrome de Alicia en el país de las maravillas.
Amelia es pequeña y lo que le rodea es grande: un jardín donde se pierde entre las flores, un gato que parece un tigre, una mesa a la que tiene que escalar…
No sabe que crecerá, pero sueña con ser tan alta como su mamá cuando se pone sus tacones.
El tiempo transcurre. Apenas de manera perceptible en la infancia; sorprendentemente raudo en la madurez.
Algo le sucede a la naturaleza que nos avisa con su cambio del paso del tiempo. Y es más fácil descubrirlo mirando a las hojas, a los ríos, a los frutos, al cielo… Primavera, verano, otoño, invierno…
A la vuelta del cole siempre hay que comprar zapatos nuevos, alargar los pantalones o cortarse el pelo.
Con la llegada de una nueva hermanita, a Amelia le parece que el mundo se ha hecho a su medida y que las cosas van haciéndose pequeñas.
Es que ver crecer a otros nos hace tomar medida del mundo que nos rodea.
Cuando los niños ven esta sencilla y siempre bonita historia, la del niño que crece, entonces se ve dentro de ella y comienza a tener consciencia de que seguramente algún día será mayor.
Si además tienen la oportunidad de verlo en un libro tan bien ilustrado como éste, puede llegar a ser emocionante.
Las ilustraciones de grafito y acuarelas de Paula Bonet son preciosas, muy coloridas y la protagonista con un semblante muy bonito.
La propuesta de presentarlo como libro pop-up es excelente.
Estos libros que contienen figuras tridimensionales en papel, son mágicos porque dan profundidad a las imágenes y al abrirse se despliega un escenario que casi se convierte en una obra de arte.
El lector, el espectador, logra saltar dentro del libro, meterse en las tripas de la historia. Esa es la sensación maravillosa que logran hacer sentir los pop-ups sobre el que mira. Esa es la sensación al fin y al cabo, que buscan los artistas cuando alguien mira sus obras artísticas.
El libro es un juguete increíble que nos acerca a la vida, a las emociones, al arte, a la estética, al pensamiento y a la imaginación.
Archivado en: Biblioabrazo. Ana Nebreda Tagged: infancia, libros pop-up
Fuente: La pequeña Amelia se hace mayor. Paula Bonet y Elisenda Roca