Abu Simbel, el culto solar a Ramses II
La historia del Antiguo Egipto sufrió una gran conmoción con el reinado de Akhenaton, del que sólo se recuperó definitivamente con la llegada al trono de Ramses II (1290 – 1224 a. C) un largo periodo en el que restauró el culto a Amon, devolvió a los grandes templos como Karnac su importancia político-religioso-económica, amplio las fronteras del reino y recuperó el poder teocrático del faraón. En este proceso tuvo un papel central una amplia campaña constructiva, que hace que su sello aparezca continuamente en excavaciones y edificios a lo largo de todo Egipto, continuo las obras de su padre Seti I y emprendió otras nuevas. Fue una campaña de propagando completa en la que se pretendía presentar al faraón como el proveedor de bienes y riquezas al país, el garante de la religión, el protector de los templos, de las fronteras, el que con intuición divina soluciona los problemas… es decir recordar que se trata de un dios viviente ampliando de forma espectacular los destinatarios del mensaje.
