NUEVA FUNCIóN DEL ARN LARGO NO CODIFICANTE
Cuando se secuenció el genoma humano, los biólogos encontrararon que muy poco del genoma, menos del 3 por ciento, se correspondía a genes que codifican para proteínas.
Resulta que en su mayor parte codifica para fragmentos genéticos conocidos como ARNs largos no codificantes. En los últimos años, los científicos han comprobado que estas moléculas ayudan a regular qué genes se activan o desactivan dentro de una célula.